Sol, playa, vacaciones, fiesta, rascacielos es lo que a uno se le viene a la mente cuando escucha la palabra ‘Benidorm’. Pero, y ¿su historia? Como cada pueblo y ciudad en el mundo, Benidorm tuvo un comienzo y para nada es como te lo esperas.
Lo que hoy es uno de los destinos turísticos más importantes de España, antaño era un pequeño pueblo de pescadores. Los apenas 2.000-3.000 habitantes que lo ocupaban, dedicaban sus vidas al arte de la pesca. Precisamente, fueron estos pescadores y marineros quiénes vieron el potencial de Benidorm tras miles de aventuras e historias vividas. De aquí, nacen los primeros hoteles de nuestro pueblo que con el paso del tiempo se ha convertido en el destino vacacional por excelencia.
Si quieres disfrutar del encanto de Benidorm desde una perspectiva diferente, ¡Los colmos de Benidorm es la excursión perfecta! En ella, tendrás la oportunidad de ver Benidorm desde los 3 puntos más altos de la ciudad: La Cruz, el mirador de El Tossal, y el mirador de Sierra Cortina.
En primer lugar, visitaremos el mirador de la Cruz. Desde aquí, disfrutarás de las mejores vistas panorámicas de Benidorm, siendo este punto el origen de miles de postales de la ciudad. El mirador se encuentra en lo alto del Serra Gelada, pudiendo acceder a ella por la zona del Rincón de Loix. En 1962, varios frailes de Benidorm realizaron una misión con el objetivo de poner fin a la imagen ‘frívola’ que estaba dando el pueblo. Por ello, se organizó una misión religiosa, con el padre Salvador Perona al frente, que consistió en llevar una cruz a lo alto de la montaña. Esta cruz fue fabricada a partir de vigas de los postes de la luz. Desafortunadamente, en 1975, un temporal la derribó, obligando a colocar una nueva. La segunda cruz, en cambio, fue construida a partir de travesaños del tren. Sin embargo, esta también sería sustituida tras un cambio de gobierno. La Cruz actual está dotada de iluminación para poder ser contemplada desde cualquier punto de Benidorm una vez caída la noche. De todo esto ha pasado ya medio siglo. Lo que en un principio fue una simple misión evangelizadora, se ha convertido hoy en un símbolo de Benidorm y en una parada turística obligatoria.
En segundo lugar, subiremos al mirador de El Tossal de la Cala. Este cerro está situado en el extremo sudoeste de Benidorm, entre la Playa de Poniente y la Playa de Finestrat. En los yacimientos se han encontrado restos arqueológicos (cerámica, hierro, huesos y vidrio) posiblemente pertenecientes a distintas épocas (Romana, Íbera…). Su ubicación sobre zonas de difícil acceso cumplía un papel fundamental en la defensa del territorio, ya que desde el mismo cerro se podía controlar el tránsito marítimo de naves amigas y enemigas. Gracias a los casi 100m de altitud, podrás deleitarte con las espectaculares vistas de la línea de costa Benidormense.
Por último, subiremos a Sierra Cortina, situado justo detrás del parque temático Terra Mítica. Es una ruta apta para todos los públicos e ideal para iniciarse en el senderismo. La gente del pueblo subía a comerse “la mona”, a caminar por la pineda o a montar en bici disfrutando, a su vez, de unas increíbles vistas. Además, es una ruta perfecta para todo el mundo, donde podrás contemplar unas vistas maravillosas de Benidorm y su bahía, el pueblo de Finestrat, Villajoyosa, el Puig Campana y la Sierra de Aitana.
Por todo ello, si quieres disfrutar del único tour panorámico de Benidorm visitando los 3 puntos más altos de la ciudad, ¡reserva ya Los colmos de Benidorm - Jeep Tour! ¿A qué estás esperando?