La pareja de gibones de manos blancas de Terra Natura Benidorm se estrena como padres
LA HEMBRA HA TENIDO A SU PRIMERA CRÍA TRAS ABANDONAR UN LUTO DE TRES AÑOS POR LA PÉRDIDA DE SU ANTERIOR COMPAÑERO
La gibón de manos blancas (Hylobates lar) que habita en el parque de naturaleza y animales Terra Natura Benidorm acaba de estrenar su maternidad. La reciente madre, bautizada por los cuidadores con el nombre de Amy, y su compañero Shantou han tenido a su primera cría después de que esta hembra superara los tres años de luto, que mantuvo tras la pérdida de su primer compañero.
Esta especie de primates es monógama. Por ello, cuando Amy perdió a su pareja estuvo varios años sin mostrar interés por ningún macho, ni siquiera por Shantou. Como además este ejemplar era más joven que ella, la hembra al principio no le hacia ningún caso. Poco a poco, las reticencias iniciales dieron paso a un acercamiento entre ambos gibones que ha culminado en el reciente nacimiento.
A pesar de que el cortejo entre los dos animales comenzó el año pasado no ha sido hasta ahora cuando han logrado tener descendencia. Con la llegada de esta pequeña cría, que pesa cerca de medio kilo, se ha consolidado la nueva pareja. Y es que Amy tiene un carácter un tanto especial. Esta gibón de Terra Natura Benidorm muestra bastante rechazo hacia otras hembras, ya sean de su misma especie o no. Veterinarias, cuidadoras o incluso visitantes no se libran de esa manía que parece tener hacia el género femenino.
La relación entre el pequeño macho y su progenitora es muy buena. Siempre va abrazado a su madre, que se desplaza con soltura y delicadeza entre las ramas de su instalación. Cuando tiene hambre, lloriquea un poco hasta que la hembra le acerca su pecho para que pueda mamar y alimentarse. De momento, el padre no interviene en su cuidado aunque si que muestra curiosidad por la cría y se acerca a ella para estudiar al nuevo individuo.
El gibón de manos blancas suele vivir en el sudeste asiático y puede llegar a formar grupos familiares de hasta 12 miembros. Su gestación dura un periodo de seis meses y en cada parto suele tener una cría. Su alimentación está basada en brotes, insectos, vegetales, pajarillos e incluso huevos.
Los largos brazos de esta especie le permiten desplazarse de rama en rama. De hecho, la longitud de sus extremidades es tal que cuando se encuentran en el suelo no saben que hacer con ellas. Al caminar en posición bípeda, suelen elevarlos sobre su cabeza para no tropezarse con ellas al correr.
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Benidorm, 9 de septiembre de 2011